dilluns, 20 de gener del 2014

Motivos para la práctica de actividad física

Motivos para la práctica de actividad física

Es una evidencia que la actividad física es un factor fundamental en la mejora de nuestra salud tanto a nivel físico, psíquico como social.
Cada día más gente toma conciencia de la importancia que tiene la práctica de actividad física como factor determinante en nuestra calidad de vida. A pesar de esto, a gran parte de la población le cuesta incluir este tipo de actividad en su vida cotidiana como un hábito más. En mi opinión, la sociedad tiene una ligera idea de lo que supone la práctica de ejercicio físico a nivel de salud, sin embargo, no se imagina hasta qué punto puede influir llevar un estilo de vida activo tanto a nivel físico, psíquico como social. Desde la prevención de numerosas enfermedades, hasta una increíble sensación de bienestar tanto físico como mental, lo cual repercutirá en gran medida en una mejora absoluta de nuestra calidad de vida.
En primer lugar, para hacernos una idea del nivel de sedentarismo que presenta nuestro país, sólo tenemos que echar mano de las estadísticas, según una encuesta realizada por el INE entre 2011 y 2012, el porcentaje de varones sedentarios es de un 35,9 %, mientras que el de mujeres se encuentra  por encima con un 46,6%. Esto indica que a pesar de la creciente práctica de actividad físico-deportiva por parte de la población, un gran porcentaje de esta parece que no sigue unos hábitos de vida activa y saludable. Está claro que la evolución sufrida en el ámbito científico y tecnológico han influido de manera determinante, tratando de hacernos la vida lo más cómoda y fácil posible con el menor gasto energético. Esto es todo lo contrario a nuestros antepasados,  los cuales consumían gran cantidad de energía en busca de alimento, desarrollando enormemente sus sistemas de producción y almacenamiento de energía. Es decir, nuestro organismo está predispuesto para almacenar energía con el objetivo de ser utilizada en un futuro próximo ante diversas situaciones que se pudiesen dar (caza, huir de animales, épocas de escasez de alimento…), el cuerpo necesita actividad física.
Además de esto, la actividad física supone una vía de escape a los factores estresantes a los que estamos sometidos diariamente. Las situaciones estresantes, provocan en nuestro organismo alteraciones hormonales y bioquímicas que nos predisponen a situaciones de defensa y lucha, pero como estas no se dan en el mundo actual, estas hormonas responsables no se eliminan, y esto conlleva a largo plazo alteraciones patológicas de los vasos sanguíneos (arterioesclerosis), y en consecuencia, el infarto de miocardio prematuro y el ataque de apoplejía. Todo esto, unido a unos malos hábitos nutricionales, agrava aún más el problema. Para verlo de forma más clara, sólo tenemos que tomar los porcentajes de mortalidad por enfermedades cardiovasculares, y ver la diferencia entre los países en vías de desarrollo y los industrializados, presentando unos porcentajes de 4% y un increíble 48%respectivamente.
Se calcula que en España (2006) en torno al 80% de la población no realiza la suficiente actividad física como para mantener la salud y controlar el peso corporal. Las enfermedades cardiovasculares y coronarias suponen, junto con el cáncer y los accidentes de carretera, una de las tres mayores causas de mortandad en los países desarrollados, y su incidencia ha ido en aumento.
Dicho esto, diversos estudios tanto epidemiológicos como de carácter experimental han puesto de manifiesto que la actividad física puede ser hoy día la mejor inversión en salud pública en Occidente.
La actividad física, tiene una gran influencia sobre nuestro organismo, suponiendo un factor más importante que la edad. Las personas que se mantienen activas, especialmente en la edad adulta y en la vejez, tienen una menor probabilidad de padecer enfermedades crónicas o una muerte prematura. Además, en el caso de los más mayores, esto provoca una ganancia de independencia funcional y por lo tanto una mejora en la calidad de vida, lo que implica menor dependencia de otras personas.  Por otra parte, hay que tener en cuenta los costes económicos en términos de enfermedad, ausencia del trabajo o sistemas de salud. Se calcula que los costes médicos de las personas activas son un 30% inferiores a los que ocasionan aquellas inactivas.
Prevención y lucha frente diversas patologías
De forma general y a grandes rasgos, podemos señalar las principales patologías sobre las que la actividad física tiene un papel muy importante:
·         Enfermedades cardiovasculares: mediante el fortalecimiento de todos los elementos del aparato circulatorio, siendo de gran ayuda en el control de la hipertensión.
·         Cáncer: presentando un gran efecto en el caso de cáncer de mama y el de colon.
·         Diabetes tipo II: disminuyendo la cantidad de glucosa en sangre, manteniendo esta bajo control e impidiendo que se agrave.
·         Asma y alergias: desarrollando la capacidad pulmonar y las vías respiratorias.
·         Osteoporosis: fortaleciendo los huesos e impidiendo que se debiliten.
·         Artritis: por medio de ejercicios orientados a mejorar la flexibilidad de las articulaciones impidiendo que se vuelvan rígidas.
·         Dolores de espalda: fortaleciendo las estructuras musculares y ligamentosas de esta región supone una gran medida preventiva contra estas dolencias.
·         Trastornos de la conducta alimentaria (anorexia y bulimia): al ser trastornos relacionados con la salud mental y caracterizados por el aislamiento, en el momento de la recuperación, la práctica de ejercicio es de gran ayuda desde el punto de vista físico, psíquico y social.
·         Estrés y ansiedad: la práctica de ejercicio físico ayuda a controlar estos estados de ánimo, incidiendo en la relajación y el descanso tras su práctica.
En conclusión, el sedentarismo se está convirtiendo en una epidemia en los países desarrollados, y es una evidencia que la falta de ejercicio está relacionada con el desarrollo de diversas enfermedades. Por lo tanto, el ejercicio físico, actividad física y/o deporte practicado de manera regular y en la forma apropiada, es la mejor herramienta hoy disponible para fomentar la salud y el bienestar de la persona. Es importante decir que si estamos pensando en iniciar cualquier tipo de actividad físico-deportiva es muy aconsejable (sobre todo en personas con algún tipo de patología) ponerse en manos de profesionales del ámbito de la actividad física y la salud.
Fuentes:
·         P.Herrera Municioa, M.J. Rojas Giraldoa y R.Vello Cuadradob. Rev. “La medicina hoy. Actividad física y salud.”
·         Dr. Jürgen Weineck. (2001). “Salud, ejercicio y deporte.”
·         S. Márquez Rosa, J. Rodríguez Ordax, S. De Abajo Olea. (2006). “Sedentarismo y salud: efectos beneficiosos de la actividad física.” Rev. Apunts, nº 83.
·         Lowther, M.; Mutrie, N.; Loughlan, C. y McFarlane, C. (1999). “Development of a Scottish physical activity questionnaire: a tool for use in physical activity interventions.” British Journal of Sports Medicine, 33, p244-249.
·         Manson, J. E.; Hu, F. B. y Rich-Edwards, J. W. (1999). “A prospective study of walking as compared with vigorous exercise in the prevention of coronary heart disease in women.” New England Journal of Medicine, 341, 650-658.
·         F. Guillén García, J. J. Castro Sánchez y M. A. Guillén García. (2003). “Calidad de vida, salud y ejercicio físico: una aproximación al tema desde una perspectiva psicosocial.” Rev. De Psicología del Deporte.
·         E. Cantón Chirivella. (2001). “Deporte, salud, bienestar y calidad de vida.” Cuadernos de Psicología del Deporte Vol. 1, nº1.
·         M. A. Prieto Bascón. (2011). “Actividad física y salud.” Rev. Innovación y experiencias nº42.
·         M. J. Castillo Garzón. (2007). “La condición física es un componente importante de la salud para los adultos de hoy y del mañana.”
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PUBLICADO POR IVÁN FEIJOO LÓPEZ
Graduado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte por la Universidad de Vigo. Apasionado del entrenamiento de la fuerza, así como de los deportes de raqueta, en especial el tenis y pádel.